La cancillería israelí reconoció que el Ejército utilizó bombas de fósforo blanco (arma química) durante su agresión contra Gaza que duró 22 días y que dejó 1400 muertos y más de 5000 heridos.

En un informe de 163 páginas publicado el pasado jueves la cancillería expresó que: “Tel Aviv ha respetado las leyes internaciones y el ejército no utilizó este tipo de bombas en lugares poblados “.

El Ejército israelí, agrega el diario, ha abierto una investigación tras varias denuncias de organizaciones humanitarias internacionales. Sostiene que empleó proyectiles de artillería con fósforo para crear cortinas de humo, y que su contenido son telas impregnadas con esa sustancia.

Las autoridades de ocupación se habían negado a cooperar con la Comisión Internacional de Investigación encabezada por Richard Goldston y la acusaron de ser imparcial.

La organización israelí Romper el silencio publicó hace más de dos semanas testimonios de soldados israelíes reconociendo que recibieron órdenes para matar civiles en Gaza, destruir sus bienes y utilizarlos como escudos humanos.