Israel cortó el suministro de electricidad a Gaza, informaron funcionarios el domingo, afectando a una planta de desalinización que produce agua potable para parte del territorio árido. Hamás lo calificó como parte de la “política de hambre” de Israel.
"Acabo de firmar la orden de dejar de suministrar electricidad inmediatamente a la Franja de Gaza", anunció el ministro israelí de Energía, Eli Cohen, en un comunicado grabado en video.
La semana pasada, Israel suspendió el suministro de bienes al territorio de más de dos millones de palestinos, en un eco del asedio que impuso en los primeros días de la guerra.
Israel está presionando a Hamás para que acepte una extensión de la primera fase del alto al fuego. Esa fase terminó el fin de semana pasado. Israel quiere que Hamás libere a la mitad de los rehenes restantes a cambio de una promesa de negociar una tregua duradera, informa AP.
Hamás, en cambio, desea iniciar negociaciones sobre la segunda fase más difícil del alto al fuego, que implicará la liberación de los rehenes restantes, la retirada de las fuerzas israelíes y una paz duradera.