El presidente egipcio, Abdel Fattah al-Sisi, presentó a los demás líderes un proyecto de cinco años para la reconstrucción de Gaza, con un costo estimado de 53 mil millones de dólares, cuyo objetivo es garantizar que los palestinos puedan permanecer en sus tierras. Esta propuesta se presenta como una alternativa al plan de Estados Unidos de convertir Gaza en una «Riviera del Medio Oriente».
"La paz real solo llegará con la creación de un Estado palestino", declaró Sisi al inaugurar la cumbre. «La paz no se impone por la fuerza ni puede ser forzada».
De acuerdo con un borrador de 112 páginas al que accedieron las agencias DPA y Reuters, una fase inicial de seis meses se enfocaría en la remoción de escombros y la construcción de viviendas temporales, con un costo aproximado de 3 mil millones de dólares.
En la primera fase, se planea edificar 200,000 viviendas en Gaza en un plazo de dos años, seguido de otras 200,000 en una segunda etapa. Para 2030, el proyecto incluye la construcción de cientos de miles de hogares que albergarían a hasta 3 millones de personas, además de un aeropuerto, zonas industriales, hoteles y parques.
La iniciativa egipcia recibió el respaldo de las Naciones Unidas y la Unión Europea (UE).
En la cumbre, el secretario general de la ONU, António Guterres, expresó su «firme apoyo» a la propuesta liderada por los árabes. «La ONU está dispuesta a colaborar plenamente en este esfuerzo», subrayó.
El presidente del Consejo Europeo, António Costa, también aplaudió la iniciativa, afirmando que «ofrece esperanza a millones de palestinos en Gaza, Cisjordania y en el extranjero» de que «el sufrimiento atroz que hemos presenciado en el último año y medio» pueda finalmente cesar.
El financiamiento de la reconstrucción de Gaza dependería en gran medida de los países petroleros del Golfo, como Emiratos Árabes Unidos (EAU) y Arabia Saudita.