Descubierto en Suecia, un anillo milenario intrigó a muchos investigadores, hasta el día en que el microscopio electrónico de barrido (SEM) reveló su increíble secreto, de gran valor histórico.
Desenterrado de la tumba de una mujer en Birka, una de las primeras ciudades fundada en el siglo 8, el anillo en forma de cabujón de vidrio, tiene la inscripción “Por Allah”.
La inscripción “Po Allah”, está hecha en letras “Koufi”, una de las caligrafías más antiguas.
Este descubrimiento confirma las relaciones comerciales que mantenían los vikingos con la dinastía abasí (750 a 1258), según el sitio Oumma.