Esta iniciativa la lanzó el Museo del Convento de Santa Catalina, en Utrecht, con apoyo del Ministerio de Educación y Cultura, y, aunque se trata de un museo físico único, los 22 templos asociados se unen bajo este denominador común, mediante horarios de apertura específicos e información accesible sobre la historia del edificio.
El último lugar de culto en sumarse a esta iniciativa es la Mezquita Ulu de Utrecht, el templo musulmán más grande de Países Bajos. “Esperamos recibir a quienes tengan prejuicios, las personas que desconfían de los musulmanes y las mezquitas, para poder iniciar un diálogo”, señaló Yücel Aydemir, presidente de esta mezquita.
Con una gran cúpula y minaretes en forma de lápiz, esta mezquita turca situada en un edificio moderno es ya centro de atención de los transeúntes del barrio Lombok de la ciudad neerlandesa de Utrecht, a tan solo unos metros de la estación de tren, pero su interior, alejado de las miradas del público general, es toda una obra de arte.
Consta de una gran sala de oración, varios balcones y una cúpula dorada, obra del arquitecto turconeerlandés Ishak Önen, quien bañó en luz natural toda la sala, incluidos sus detalles dorados, gracias a la instalación de ventanas en la cúpula y unas franjas transparentes en el techo. La decoración es del artista turco Muammer Semih İrteş, autor de la caligrafía, informa Efe.