La decisión del Gobierno español se produce en medio de la polémica que rodea al carguero Borkum, que sí cuenta con autorización española para atracar en Cartagena y cuyo destino no es Israel, sino la República Checa, según el Ejecutivo.
La decisión del Gobierno español se produce en medio de la polémica que rodea al carguero Borkum, que sí cuenta con autorización española para atracar en Cartagena y cuyo destino no es Israel, sino la República Checa, según el Ejecutivo.